El día 17 de abril es el Día Internacional de las Luchas Campesinas por lo que ha sido elegido para la campaña #SOScampesinau por el apoyo a la producción y distribución de alimentos locales y de cercanía.
Distintos colectivos, organizaciones sociales, consumidoras/es y productoras/es están organizando esta acción conjunta para exigir a los ayuntamientos que reactiven los mercados locales y que apoyen la producción local de alimentos. Más de 600 organizaciones del país piden por carta a los ministerios de Agricultura, Sanidad y Consumo medidas urgentes para mitigar el impacto económico en los sectores agrícolas y ganaderos. En Asturias dicha carta se trasladó a la Consejería de Agricultura, y ante la falta de respuesta, el siguiente paso de la campaña es comunicarse con los distintos ayuntamientos, así como a toda la población.
La entrada en vigor del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID19, está poniendo al límite a muchos sectores de la ciudadanía en Asturies, como en todo el país. Estamos comprobando cómo el sector primario, productor de alimentos básicos para la población y específicamente la producción a pequeña escala y la agricultura familiar campesina, no está siendo considerado en la medida en la que deberían en la situación de crisis actual. De seguir como hasta ahora, esta crisis puede afectar gravemente a la producción local de alimentos, y la producción a
pequeña escala en Asturies podría desaparecer.
Para evitar esta situación extrema, desde distintos colectivos, organizaciones, consumidoras/es y productoras/es se pone en marcha una campaña específica que incluye la distribución de una carta para entregar en los ayuntamientos, la recogida de adhesiones y apoyos sociales a esa carta y una acción conjunta este viernes 17 de abril. Entre las demandas a los ayuntamientos asturianos, que recoge en esa carta, están las siguientes:
1. Que busquen soluciones para autorizar el mercado no sedentario de proximidad en un espacio que permita el acceso controlado, regulando las condiciones de higiene y seguridad sanitaria para evitar la transmisión del COVID19, con el objetivo de mejorar el derecho a la alimentación y a una nutrición adecuadas a toda la población por medio de estos canales.
2. Que se presione a las autoridades competentes para que autoricen explícitamente los desplazamientos a granjas, huertos y corrales de autoabastecimiento de alimentos, incluso sin estar la persona dada de alta en el régimen agrario, tanto para el mantenimiento del funcionamiento de la granja, como para la cosecha de alimentos.
3. Que en la compra pública de alimentos para espacios de restauración de competencia municipal y bancos de alimentos, ahora más que nunca, se prioricen los productos locales, los de las pequeñas granjas y los agroecológicos, especialmente aquellos productos procedentes de los sectores que han resultado más perjudicados por el cierre de la hostelería.
4. Que se implementen medidas fiscales, como la exención del pago de impuestos municipales, en apoyo a pequeños productores/as agroalimentarios, del mismo modo que con otros sectores clave para la sociedad, orientadas a mitigar las pérdidas derivadas de la crisis
relacionada con la pandemia del COVID19.
5. Que se comunique a la sociedad en su conjunto, a través de campañas de sensibilización, la importancia de la agricultura campesina a pequeña escala y del consumo de productos locales, de temporada y frescos, así como la seguridad alimentaria de los mercados no sedentarios de proximidad y otras vías de venta directa.
Esta iniciativa se presenta el 17 de abril por ser el Día Internacional de las Luchas Campesinas, participando de la necesidad de un nuevo modelo agroalimentario que contribuya a enfrentarnos a la emergencia climática, pues las agriculturas campesinas enfrían el planeta. En ese sentido, apoyamos responsablemente la convocatoria internacional de jornada de acción global por el clima del próximo día 24, promovida por Fridays For Future y compartida de forma unitaria por cientos de colectivos de todo el Estado, que entendemos indispensable una transición ecológica y social justa para que haya un futuro para las personas y el planeta, pues después de la amenaza del COVD19 nos espera la más global del cambio climático.
Fundación EDES; Asturias