“Plantamos una vid en Barcelona, arraigamos en Collserola” es el nombre de la campaña de micromecenazgo que L’Olivera empieza a través de la plataforma de crowdfunding Goteo.org para financiar la recuperación de la viña en la finca de Can Calopa, en Collserola, que es actualmente la única viña de la ciudad de Barcelona.
El objetivo es doble: por un lado, necesitamos hacer productiva la viña sustituyendo las variedades que el Ayuntamiento de Barcelona plantó en el año 2001 (Agriogitiko, Aglianico, Sangiovese) por variedades autóctonas y mediterráneas, después de constatar que estas variedades no se han adaptado a las condiciones frescas de la finca. Sólo así, conseguiremos ser un proyecto agrícola y productivo sostenible a largo plazo, arraigado al territorio y que contribuye a la transformación agroecológica del parque de Collserola, así como a la preservación del paisaje y del patrimonio histórico.
Por otro lado, y como consecuencia, con la nueva plantación podemos dar continuidad a la apuesta por este proyecto cooperativo de agricultura social que actualmente general oportunidades laborales y sociales para casi una veintena de jóvenes con dificultades y en riesgo de exclusión social que viven y trabajan en la finca.
Así pues, desde el punto de vista productivo, la nueva plantación nos permitirá aumentar la producción actual, que es de unos 3000 kilos de uva, hasta llegar a los 10.000 kilos. Este aumento nos permitirá asegurar la viabilidad de este proyecto con la generación de nuevos puestos de trabajo para jóvenes.
Con este doble objetivo iniciamos, pues, esta campaña de micromecenazgo coincidiendo también con los 10 años de trayectoria de la Cooperativa L’Olivera al mando de este proyecto agrícola en Barcelona, un proyecto que empezaba L’Olivera en el 2010 reproduciendo el modelo de agricultura social que ya tiene en Vallbona de les Monges, en la Catalunya interior, donde nació en 1974.
De aquí nace también el único vino de la ciudad, el Vinyes de Barcelona, un vino que reivindica la actividad agrícola ligada a las grandes ciudades. El proyecto de recuperación de la viña prevé la replantación progresiva de las 3,5 hectáreas de la finca, que ya se inició el año pasado con la plantación de 0,4 hectáreas y que continuará este año con una nueva fase de una hectárea más. En total, la campaña de microfinanciación prevé cubrir los gastos de esta plantación, alcanzando un importe mínimo e indispensable de 16.000 euros (en la primera fase de la campaña) y hasta 24.000 euros (en la segunda fase, que incluye tareas adicionales de mejora).
Diez años después de aquellos inicios, que han culminado con la elaboración de un vino tinto representativo de la ciudad de Barcelona, la nueva plantación plantea la posibilidad de abrirse camino en variedades blancas, con el objetivo de poder producir un vino blanco de finca que recupere el pasado agrícola de la finca. Así, desde L’Olivera hemos iniciado un trabajo de investigación histórica para dar con las variedades que se plantaron antiguamente en esta zona y recuperarlas para elaborar el nuevo Vinyes de Barcelona blanco. Este trabajo está en proceso pero ya podemos avanzar que algunas de las variedades en estudio serían el Xarel·lo o Pansalet, el Sumoll de grano pequeño o el Picapoll.
Encontraréis más información del proyecto en https://goteo.org/project/plantem-un-cep-a-barcelona