COCEDER ha comenzado a desarrollar un proyecto, cofinanciado por la Junta de Castilla y León y el Fondo Social Europeo, con el objetivo de facilitar la inserción sociolaboral de las mujeres inmigrantes en cinco comarcas de Castilla y León. Este proyecto, con una subvención concedida de 27.079 euros, se enmarca dentro del programa de precapacitación e inserción laboral de mujeres en situación de especial vulnerabilidad en el ámbito regional.
Las personas destinatarias son mujeres inmigrantes de la comarca de El Barco de Ávila, Piedrahita y Alto Gredos (Ávila), Medina de Rioseco (Valladolid), Tierra de Campos de la zona Norte de Valladolid (Mayorga), Hóspital de Órbigo (León), Carrión de los Condes y Frómista (Palencia).
Las actividades que se llevarán a cabo serán de difusión y formativas en el sector de la atención sociosanitaria a personas dependientes en el domicilio (teórico-práctico), auxiliar de cocina, actividades formativas de español con talleres que fomenten la interculturalidad e inserción laboral creando una bolsa de empleo de auxiliares de ayuda a domicilio. También se impartirán talleres de formación complementaria como introducción a la informática, orientación laboral y técnicas de búsqueda de empleo, autoempleo, sensibilización medioambiental aplicada al ámbito doméstico, prevención de riesgos laborales e igualdad de oportunidades.
Esta formación de precapacitación consistirá en la adquisición de habilidades básicas (idioma castellano, conceptos de competencias básicas en matemáticas y lenguaje), habilidades funcionales (orientadas a la búsqueda activa de empleo con itinerarios individualizados de inserción sociolaboral que mejores su empleabilidad), así como acciones formativas de capacitación laboral adaptadas a la realidad mencionada, que incluya unos contenidos adaptados de los certificados de profesionalidad (atención sociosanitaria a personas dependientes en domicilio, operaciones básicas de cocina), que les permita adquirir unos conocimientos para poder acceder al mundo laboral e ir adquiriendo una experiencia que posteriormente les permita acceder a la cualificación por experiencia laboral o vías no formales de formación.
Con estos itinerarios formativos se pretende paliar las dificultades específicas y de especial vulnerabilidad derivada de la doble condición de mujeres e inmigrante, incidiendo en los aspectos de formación y capacitación que favorezcan, además de su inserción laboral, su participación en la comunidad rompiendo barreras sociales y culturales.